El Tint, del s. XV, es uno de los pocos edificios góticos industriales que quedan en Cataluña. Estaba dedicado al tinte de la lana y es el único edificio de tinte manufacturero que se conserva en Cataluña.
Tiene dos naves separadas por cuatro grandes arcadas ojivales que sostienen una trama de madera, originariamente con cubierta a dos vertientes. El altillo, el actual segundo piso, es de bóvedas de arista y se accede a él por medio de una escalera con bóveda de losa.
El edificio también se caracteriza por tener una gran altura debido al hecho de que en el proceso de tintado de los tejidos de lana u otras ropas, se producían vapores insanos que se intentaban evitar con la altura. Se cree que las telas, una vez teñidas, se colgaban bajo el tejado para hacer el primer secado y el agua que se utilizaba en este proceso preindustrial procedía del Rec Major, que pasa por el edificio.
En cuanto al funcionamiento de la industria, el Rec Major se desviaba dentro del edificio y el agua circulaba a través de unas tinas o bañeras excavadas en la roca donde se colocaban las telas para teñir. La acequia daba la vuelta al interior del edificio y volvía a salir a su curso originario.
El Ayuntamiento de Banyoles recuperó el edificio en el año 1971, después de caer en desuso durante muchos años, con tal de evitar su destrucción.
Ubicación: Carrer Sant Pere, 8